Vivimos repletos de libros, documentales, películas e incluso series de televisión que nos narran la “verdad” de los acontecimientos pasados. Pero, ¿Qué tanta de esa verdad es real? George Orwell en su distopía “1984”, nos dice que la historia siempre es escrita desde el punto de vista del vencedor, es decir, que la realidad puede ser transformada en cualquier momento dependiendo de los intereses de los ganadores. Un ejemplo claro de esto, es explicado por Benito Taibo en su libro “Persona Normal” en el capítulo “Cómo se perdió el Oeste”, en el cual el joven Sebastián lee acerca de los actos barbáricos que realizaron los colonizadores americanos e indaga con su profesora acerca del tema, pero es ahí cuando se da cuenta de que muy pocos conocen la historia desde el punto vista de los Sioux. Muy pocos creían que los colonizadores habían cometido actos inhumanos, y muchos adoptaron la ideología de que los colonizadores Civilizaron a los Sioux.
Para no ir tan lejos Corea del Norte está bajo un régimen totalitario
en el que la “verdad” es inventada por el propio gobierno Norcoreano. Muchos
habitantes dudan de la verdad de su país, pero otros muchos adoptan esa
realidad y viven creyendo cada falacia dicha por su gobierno. Es casi como lo que
pasa en cualquier otro país subdesarrollado, los medios de comunicación informan
mal o a medias, el gobierno es corrupto y la gente cada vez piensa menos.
La historia siempre cambiara, pero la verdad es solo una. En
ti está, el dejar de pensar y tragarte todas las mentiras de tu gobierno o
investigar y crearte un criterio propio.
